Tras estos siete años desde que dejé Mallorca para venir a estudiar y a buscar un futuro a Madrid, y a partir de toda la experiencia que la edad y las horas de atención a la radio, revistas y libros musicales me han dado, me doy cuenta ahora cuando miro a mi estantería de discos de que lo que ocurrió en la isla durante toda esa década no fue normal. Me refiero a una escena en torno a un subgénero tan minoritario como es el punk rock y el hardcore melódico que, importados directamente desde el sur de California, dieron lugar a un circuito de más 40 bandas que ensayaban, grababan discos y daban conciertos en los que movilizaban a cientos de personas. Aunque en los distintos eventos se reuniese tanta gente, no dejaba de ser una escena minoritaria respecto al panorama musical del resto de España. Todas estas premisas no hacen más que incrementar mi inquietud y me obligan a afinar la pregunta que me hacía al principio: ¿cuáles fueron las condiciones que en este caso favorecieron el surgimiento de una escena tan potente y que a la vez estuvo tan silenciada más allá de las fronteras naturales de la roqueta?

Buscando documentación sobre este fenómeno es imposible encontrar información más allá de algunas reseñas de discos que se hicieron en revistas como RockZone y otros varios artículos publicados en periódicos locales como Diario de Mallorca y Última Hora. Para mi sorpresa, me doy cuenta de que en internet también resulta muy complicado encontrar información sobre la mayoría de los grupos que formaban parte de aquel movimiento, cuyos discos sí que están en mi estantería y me confirman que todavía no he perdido la cordura buscando mi Atlántida musical. A partir de aquí me aventuro a extraer varias conclusiones: la primera es que en internet no se encuentra todo como creíamos creen muchos. La segunda conclusión es que la formación de la escena punk rock en Mallorca fue tan espontánea como su desintegración, y esto no hace más que animarme a investigar a través de testimonios personales qué fue lo que pasó exactamente en aquellos maravillosos años.